La Biblioteca virtual Miguel de Cervantes (I)

La Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes nació en 1.999 por iniciativa de la Universidad de Alicante. Los más viejos del lugar recordarán esos años. Hay una leyenda urbana circulando por ahí que afirma que en aquellos días existía una cosa llamada trabajo 🙂

Fueron los años en los que se gestó la llamada burbuja de las puntocom. Con una todavía escasa penetración de internet entre la población, muchas empresas se lanzaron a una vertiginosa carrera por estar presentes en la red. Tiendas virtuales imposibles, inversiones millonarias, portales como Terra que se hundieron tan rápido como crecieron llevándose con ellos los ahorros de buena parte de confiados inversores. Empresas de diseño web y consultoras de internet nacieron y desaparecieron con igual rapidez. Lo sé porque yo formé parte de una de ellas.

Sin embargo fue el principio de una ola imparable que, aún hoy, no sabemos muy bien hacia dónde nos llevará. Las instituciones culturales y educativas no fueron ajenas a esta burbuja. De hecho fueron las pioneras en poner a disposición de los usuarios de internet sus recursos culturales. Ya he comentado en alguna que otra ocasión como allá por mediados de los 90 empezábamos a consultar desde las áulas de informática de nuestra facultad los catálogos de bibliotecas y universidades norteamericanas. Nos parecía poco menos que ciencia ficción.

La Biblioteca Miguel de Cervantes fue una de ellas, sobreviviendo y creciendo hasta nuestros días. En la actualidad cuenta con alrededor de 135.000 recursos bibliográficos de los cuales 60.000 son libros. Obras clásicas de nuestra literatura pertenecientes al dominio público y, por tanto, de acceso libre.

La web de la Biblioteca está dividida en ocho grandes áreas o portales temáticos: Literatura española, Biblioteca americana, Biblioteca Joan Lluís Vives, Biblioteca de signos, Letras Galegas, Literatura Infantil y Juvenil, Historia y lengua.

La estructura de cada uno de estos portales es muy similar, lo que en buena manera facilita que nos habituemos con rapidez a los materiales de sus respectivos catálogos, ya sea utilizando sus buscadores o navegando por los catálogos. La búsqueda en estos últimos está organizada en todos los casos por orden alfabético de autor y título. Podemos recurrir también a la búsqueda por Clasificación de Materias (CDU).

A lo largo de la próxima semana iremos analizaremos en profundidad cada uno de los portales temáticos que conforman la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.

Eso es todo por ahora amig@s. Nos vemos en el camino…

Francisco Arellano